domingo, 30 de marzo de 2008

LA POESÍA DE LOS 60 Y LA ACTUAL FALTA DE UN VERDADERO DEBATE

Como consecuencia de la aparición y posterior lectura del libro que titulé "La verdad sobre El Pan Duro-Grupo de poesía-(1955-1964)", he recibido algunas opiniones, impresiones y textos de interesante contenido relacionados con la poesía en la década del 60, el grupo Barrilete, nuestras posturas y definiciones frente a la realidad nacional planteadas fundamentalmente en el "Manifiesto" del libro publicado por "La Rosa Blindada" en 1963 y sus resonancias. Una de las cuestiones que tienen que ver con todo esto, produjo un intercambio de ideas a través de algunas opiniones recibidas, de las cuales reproduzco para tener en cuenta, los siguientes textos, que intuyo, pueden ser motorizadores de un rico diálogo abierto, al que invitamos a participar a quienes se interesen en esta problemática, poniendo este blog a su disposición.

            Pienso que este tipo de diálogos y debates, resulta hoy más que nunca necesario, ya que han pasado años en que muchos de los protagonistas de entonces fueron ignorados o ninguneados, como asimismo sus posturas asumidas públicamente pero poco tenidas en cuenta por la crítica y los medios del establishment "literario". Otro de los motivos es la impresión que tenemos algunos sobre la actual falta de debate de las ideas en los círculos literarios y culturales que actúan como islotes donde se entronizan a sus propios paladines y se excomulgan a los que con suerte consideran sus adversario, mientras que ante una opinión divergente se responde con el silencio o el deliberado desconocimiento

 

 

DE CARLOS PATIÑO A HÉCTOR NEGRO

 

Hermano: acabo de terminar de leer tu libro. Las sensaciones que me produjo tu relato a veces crónica a veces ensayo son indefinibles. De pronto me sentí transportado a aquella época gloriosa, sentí el ambiente, las voces y hasta los olores de los boliches en donde nos juntábamos. .Pero sobre todo sentí - o volví a sentir - la ebullición, la fiebre, la incomparable adrenalina de nuestra aventura. No sólo poética, sino como experiencia de vida.

Pese a no haber sido, me sentí parte de EL Pan Duro, tal vez por dos cosas: una, porque conozco a casi todos y aprecio y he recordado a través de tantos años en todo momento a la gente de El Pan Duro, especialmente a vos y a Juan, con quien he tenido, especialmente en México, una relación constante. Me acuerdo de Bandoneón de papel - lo debo tener por ahí, ya lo encontraré - y en mi ya inhallable libro "Manuales del sobreviviente". que escribí al volver a Baires - cito en mi poema SAFE algo tuyo que dice La poesía puede/por algo es una flor enloquecida/ que se transforma en pájaro y martillo. También cito a Juan y a Raúl Gonzalez Tuñon y a Cacho y a Roberto Diaz... Lo cual me lleva a la segunda cosa que menciono: hay tal paralelismo entre El Pan Duro y Barrilete que al leer la historia de uno es como si estuvieras leyendo la historia del otro. En líneas generales, claro. Hay anécdotas intransferibles y hechos diferentes, pero en general...

El grupo Barrilete se consolida definitivamente cuando El Pan Duro desaparece, alrededor de 1964. Es decir, nosotros continuamos - sin saberlo y sin pensarlo - la acción iniciada por uds. Cuando hablás de las lecturas de poemas en los lugares más insólitos, cuando hablás de "sacar la poesía a la calle" y si la gente no viene a la poesía nosotros iremos hacia la gente, todo eso, estás escribiendo la historia  de Barrilete. Nosotros sabíamos que otra gente lo hacía o lo había hecho pero ese no era el punto. El punto era la poesía. Precisamente de este principio surrealista - porque el surrealismo fue la última escuela literaria que admitimos y sólo en sus aspectos no tenidos en cuenta por la generación que se llamó "surrealista" sin serlo, porque eran poetas de gabinete, muy buenos, quien puede negar a Olga Orozco o a Ricardo Molina, pero no eran surrealistas. Nosotros sí, porque sacamos la poesía a la calle, principio cardinal del surrealismo – nace la idea de los Informes, todavía más cerca de la gente, como que lo entregábamos en mano.

Otro paralelismo entre nosotros: Epitafio del Gris, de Roberto, y Hombre de doce menos cuarto, mío, fueron presentados juntos el mismo día y en el mismo lugar - La Calle, el boliche en donde tocaban Piazzolla, el Tata Cedrón y Facundo Cabral - en la calle Talcahuano. Hacía un calor de locos, había más de 200 personas y Mederos traspiraba como en un sauna cuando tocó. Mirá si hay puntos de contacto...

Te agradezco que valores como lo hiciste  mis reflexiones sobre la poesía de los 60, desperdigadas por ahí. Incluso se han hecho por lo menos dos tesis universitarias sobre mis reflexiones, pero no sé dónde están. Supongo que en algún gabinete universitario.

Hay mucha tela para cortar y así en caliente es lo que por ahora se me ocurre. Ya hablaremos más.

 

Un abrazo y gracias. CARLOS PATIÑO

 

DE HÉCTOR NEGRO A ALBERTO WAINER

 

Estimado Alberto: Te reenvío el mensaje que me mandó Patiño, ya que tiene mucho que ver con nuestras reflexiones sobre la poesía de los '60 y lo que me dijiste en el último comentario que me enviaste en relación con tus reflexiones sobre el orígen y significado de El Pan Duro, y las de él, que yo entendí y consideré como complementarias. Creo que en este texto de Patiño hay una hipótesis que habría que considerar seriamente y que creo que a mí se me escapó al escribir el libro: que es que Barrilete se consolida cuando nosotros nos autodisolvemos y ellos vendrían a ser como una continuidad de El Pan Duro en una época más cruenta y violenta que la que nos tocó vivir en nuestro quehacer. No sé que te parecerán estas reflexiones, pero a mí me hacen pensar que no son tan desacertadas.

 

HÉCTOR NEGRO

 

 

DE ALBERTO WAINER A HÉCTOR NEGRO

 

Si, Héctor. Hay en lo que dice Patiño pistas interesantes. No cabe la menor duda que había muchísimas cosas que compartían el Pan Duro y El Barrilete, creo también que había otras que no, o por lo menos, que no eran asumibles por la totalidad de los miembros de uno y otro grupo. De hecho lo mismo ocurrió con La Rosa blindada, en ella nos sentíamos comodos algunos y otros, lo recuerdo perfectamente, sobre todo "los compañeros de ruta", le escapaban a la actitud tan frontalmente crítica al P.C.A.. Sobre el particular tengo muy claros  recuerdos de una conversación con Castelpoggi (y por ahí podría rastrearse su falta de entusiasmo a la hora de entregarnos los poemas para la antología).

No quiero entrar en el plano estético, que sin embargo era importante, pero basta con confrontar las ideas de Patiño y las mias, respecto al 55, para advertir que partíamos de descripciones bastante disímiles (y hasta antagónicas) de la cultura y del campo nacional y popular y, naturalmente, habría sido muy dificil articular nuestras estrategias personales.

Bueno, la cuestión es que parece que has abierto un lindo espacio para volver a pelearnos (fraternalmente, por supuesto).

Un abrazo. Alberto

jueves, 20 de marzo de 2008

REDESCUBRIMIENTO DEL POETA ROSARIO MASE

Ante algunos comentarios elogiosos recibidos en este Blog, referidos a la poesía de Rosario Mase (apenas un fragmento transcripto, de un soneto que reproduciré completo), incluiré otro de sus sonetos de su primera publicación:"Los muelles insumisos"(Ediciones El Pan Duro). Evidentemente, quienes leen con atención y sin prejuicios tienen mayor capacidad de recepción y sensibilidad que aquellos que en su momento, lo ignoraron, ningunearon y ocultaron con su miopía poética y sus concepciones elitistas de la poesía. Aquella crítica mercenaria y malévola pasó al olvido como los seudos poetas que ellos "manijearon". Poetas como Rosario Mase seguirán conmoviendo a las nuevas generaciones por su sentimiento y calidad expresiva. Su obra editada alcanza 5 volúmenes, exisitiendo además (creemos que puede rescatarse) una gran cantidad de poemas inéditos. Ojalá toda su poesía se difunda como en verdad merece. (H.N.)
 
Reproduzco, en esta pequeña muestra, los 2 sonetos "Estibador muerto", completos:
      
      ESTIBADOR MUERTO
                 I
Ayer nomás, gestaba firmes trazos,
y hablaba con la historia tu mirada...
Por un techo y un pan de agrios pedazos
bajabas con el alba a la bordada.
 
Te alzabas vertical sobre tus pasos,
resuelto brío y rica la ordenada
hombría jubilosa de los brazos
activos de sustancia iluminada.
 
Ayer nomás, los ojos hacia arriba,
quemando en tu quehacer profundas sales,
crecías dominando a la alta estiba...
 
y eufórico de cables y señales,
largabas tu gramática cautiva
de barcos con fatigas animales.
                II
Y ahora estás allí, desparamado...
vencido por el hierro, en la despierta
tarde del muelle, que te ve humillado
la carne que era luz, sucia y abierta.
 
Estás allí, brutal, todo apagado.
La sangre lame y tiñe la cubierta
y el gesto de un asombro ya cuajado
se resuelve en la atroz mirada muerta.
 
Heraldo de la paz y la herramienta:
caído y estirado junto al guano
y el hoyo que a tu pecho lo revienta.
 
El mundo de tus sueños, muerto hermano,
la curva de tu sangre recalienta
y avanza por la estrela hasta tu mano.

martes, 18 de marzo de 2008

HOMERO EXPÓSITO

HOMERO EXPÓSITO: SU POESÍA NOS SIGUE ALUMBRANDO

por Héctor Negro

 

Un 23 de setiembre de 1987, fallecía Homero Expósito, uno de los más importantes poetas del tango de todos los tiempos. Y todavía cuesta asumir su partida, creerla cierta. Porque siempre es posible seguir descubriendo en sus versos la frescura de lo recién nacido. Y comprobar con sorpresa cómo alguna hasta hace poco desapercibida obra de su repertorio, logra trascender y afianzarse en el gusto de la gente. Lo que revela una  compleja pero saludable síntesis de lo valioso y lo perdurable, tal vez una de las más ansiadas metas de todo poeta popular.

            Lo cierto es que hablar de Homero Expósito es ocuparse de un poeta vivo y vigente. No sólo del tango, sino de todo el espectro de la poesía. De la ´"única e indivisible" que definió Raúl Gonzalez Tuñón. Porque este Homero es una caja de tenaces sorpresas y osadías que el tiempo no logra cerrar. De alguna manera, este imprevisible Homero vino a demostrar con hechos(poético-cancionísticos) lo que Leopoldo Marechal condensó en un concepto: que "el tango es una posibilidad infinita". Con temas tan eternos, como audaces e inesperados. Eternos como la historia de "Percal"(tantas veces mentada), pero alumbrada con los fulgores de su talento e inventiva, de sus aciertos expresivos("Te fuiste de tu casa./ Tal vez nos enteramos mal...", versos que produjeron la admiración y sana envidia de Discépolo). Eternos como esas trenzas "de color de mate amargo", capaces de endulzar un "letargo gris" y de incomodar a los poco imaginativos. Eternos como cualquier adiós, pero donde el adiós descubre que: "tu  forma de partir/ nos dio la sensación/ de un arco de violín/ clavado en un gorrión..."("Óyeme"). Un adiós que recuerda un ayer en el que "pensaba de perfil", como para darse todos los adioses, pero con su propio y único estremecimiento.

            Y también inesperados desde el título, el planteo o el lenguaje atrevido y esencial, como en "Afiches" ("Luego la verdad, /que es restregarse con arena el paladar"); "Maquillaje" ("Tú compras el carmín/ y el pote de rubor/ que tiembla en tus mejillas, /y ojeras con verdín..."); "Pigmalión" ("Hielo seco/ de tu amor que me ha quemado, /verso inútil, fruto hueco."); "Sexto Piso" ("Allí abajo se revuelven como hormigas: /mucha fatiga, pero mucha cuesta el pan.") o "Tristezas de la calle Corrientes" ("Los hombres te vendieron como a Cristo/ y el puñal del Obelisco/ te desangra sin cesar..."). Inesperados y a la vez penetrantes, como muchos otros que podrían reproducirse para registrar un inagotable muestrario de bellas audacias poéticas incorporadas naturalmente al lenguaje de la más alta expresión cancionística que el tango supo producir, tan difícil de encontrar en ese nivel en otros cancioneros populares..

            Fue el paradigma de la generación de poetas del tango surgida en la luminosa (para el tango) década del 40, en el momento en que los "grandes" del género atravesaban una fecunda madurez. Cuando sólo era posible abrir nuevos caminos "a poesía limpia", como para destacarse , pero a la vez diferenciándose de Cadícamo, Discépolo, Manzi, Cátulo Castillo, pero sin alejarse de la gente. Llegó en el momento justo de un estallido nuevo en el panorama del tango. Pero tuvo también el talento, más que justo, para responder a las exigencias de su época. Nos hizo todo más difícil a los que llegamos detrás, por su estatura poética incitadora del asombro. Pero nos brindó un arma más, nos dejó una imponderable y enriquecedora herencia: su obra. Que no me cansaré de repetir: es una inmensa lección de cancionística.

            De su bohemia se ha hablado y escrito, de sus recaladas en boliches y de su vocación de madrugadas. Pero no se ha insistido lo suficiente en dejar en claro su profesionalidad y su disciplina. Al respecto, el testimonio de Héctor Stamponi – coautor con Homero de memorables obras- ha sido elocuente: "Era tremendamente minucioso y trabajador, obsesivo y pulcro hasta el extremo."

            El fundamento de su singular inventiva(y valga nuevamente mencionarlo), era su talento. Sobre él, crepitaba su audacia creativa; sumaba además su formación universitaria (cursó, sin terminar, la carrera de letras) y una vasta sabiduría recogida de la calle y de la vida. En él se conjugaban "Las flores del mal" de Baudelaire. La "...temporada en el infierno" de Rimbaud, las truhanerías de Francois Villón, con el funambulesco Buenos Aires de Nicolás Olivari, los Tuñón,

las criaturas discepolianas y las "ginebras desastrosas" de sus personajes, alguno de los cuales sabía "deshojar la espera "a punta de cuchillo. Supo transmitir la humillante y angustiada sensación de tener ganas de "balearse en un rincón", el sabio reproche de que "en la vida/ se cuidan los zapatos andando de rodillas" y descubrir que alguien puede ser "más blanda, que el agua blanda". Y jugar como un diablo o un ángel travieso, con las rimas interiores de los versos que le agregaron esa indefinible música a las melodías que enriquecía o sugería desde su torrente poético que sabía iluminar sobre los pentagramas, verdaderas  contorsiones de armonías indefinibles.

            En Buenos Aires, una esquina (Lavalle y Paraná) lleva su nombre; en Zárate (su terruño),

un gran Anfiteatro; la Sociedad de Autores que él honrara como parte de ella(SADAIC),  lo recuerda con un retrato en su interior y le brindó una placa de bronce en su esquina, que la impiedad de los tiempos que corren vió desaparecer en una "noche zurda", como el supo adjetivar en uno de sus tangos.

            Pero más allá de todo ello, el verdadero y definitivo monumento está edificado en el corazón y en la memoria del pueblo que escucha, canta y silba sus canciones y se sigue conmoviendo al oir sus versos. Los que siempre son capaces de volver a asombrarnos.

domingo, 16 de marzo de 2008

CELEBRANDO EL PREMIO DE EUGENIO MANDRINI

El poeta y narrador Eugenio Mandrini ha obtenido el 1er. Premio de Poesía Olga Orozco, que organizó la Universidad Nacional de San Martín a través de su revista "Nómada" y de la Cátedra de Poesía Lationoamericana, con su libro "Conejos de nieve". Participaron de ese Concurso más de 650 poetas de numerosos países y del nuestro.
    Celebramos este galardón obtenido por este importante poeta, después de muchos años de fecunda y calificada obra, no difundida ni reconocida en la dimensión de sus merecimientos. Los amantes y cultores de la buena poesía y sus amigos de siempre, fundamentalmente sus compañeros de la revista "Buenos Aires, Tango y lo demás", recibimos con gran alegría el fallo del Jurado (que fue unánime) y felicitamos a nuestro querido y admirado amigo de tantos años. ¡SE HIZO JUSTICIA!

sábado, 15 de marzo de 2008

ROSARIO MASE .... POETA

Había llegado a las reuniones del Grupo (entre otros, como ya lo mencioné anteriormente) Rosario Mase. Era un hombre mayor que todos nosotros, entonces todos veinteañeros. En esa época tendría alrededor de 45 años, además era trabajador del Puerto, donde había sido estibador. Criado en el barrio de La Boca, traía un fascinante mundo en los paisajes que pintaban sus poemas y en su experiencia de trabajador consecuente y políticamente lúcido. Su modestia era natural y propia de su manera de ser y del mundo que nos traía. Nos trataba además con enorme respeto y veía al Grupo como algo sólido y verdaderamente útil para luchar por sus ideales y reafirmar los valores culturales que demostraba haber cultivado pese a su ruda tarea y al ambiente en el que se desenvolvía (...)

 

El conjunto de poemas que integraban Los  muelles insumisos nos habían conmovido a muchos de los integrantes del Grupo, por el fascinante universo que traían en su interior, expresado en un lenguaje poético, sencillo, pero exaltado, con el rigor de una escritura plena de síntesis pero comunicativa. Por momentos sorprendía su rica adjetivación, su manejo de originales metáforas y sobre todo su "oficio" de sonetista, forma en la que lograba muchas de sus felices pinturas, que en la mayoría de los casos eran auténticas vivencias llenas de crudeza y no exentas de ternura. Esa especie de descubrimiento poético de un ambiente y una voz totalmente diferentes a lo que conocíamos y discutíamos habitualmente, nos deslumbró y decidimos casi como un gesto irreprimible, darlo a conocer de cualquier manera. Así nació la Colección Cuadernos de Poesía, producto de un entusiasmo y de un impulso de iluminar algo que necesitaba la luz de la letra impresa (Fragmentos de "La verdad sobre el Pan Duro. Grupo de Poesía (1955-1964). Marcelo Héctor Oliveri Editor)

 

          Estibador muerto

          (Rosario A. Mase)

 

... Y ahora estás allí, desparramado ...

vencido por el hierro, en la despierta

tarde del muelle, que te ve humillado

la carne que era luz, sucia y abierta.

 

Estás allí, brutal, todo apagado.

La sangre lame y tiñe la cubierta

y el gesto de un asombro ya cuajado

se resuelve en la atroz mirada muerta...

miércoles, 12 de marzo de 2008

BIEN DE ABAJO

Este tango fue estrenado y grabado en 1967 por la orquesta de Osvaldo Pugliese y la voz de Abel Córdoba. También fue grabado, entre otros, por Miguel Montero y Rubén Juarez.

Bien de abajo

(Tango)

I

Yo soy bien de abajo y anduve a los tumbos
cuerpeando la mala y al fin le gané.
Me pesó en el lomo conservar el rumbo.
Me costó mis golpes, pero no aflojé.

Peleé por la luz que quisieron robarme
y si perdí cosas, salvé lo mejor.
Hoy tengo el orgullo de no doblegarme.
De saber que nadie me vende un buzón.
II
Por eso mi tango nació retobado.
Porque me he cansado de ver aguantar.
Cuando creo en alguien, me pongo a su lado.
Y si estoy jugado no me vuelvo atrás.

Y si es que mi vida
la vivo a los saltos,
tengo tanto asfalto,
que caigo "parao".

I bis

Soy sangre rebelde, muchacho de abajo.
Yo creo en mis brazos, en lo que ellos dan.
Y del lado izquierdo me caigo a pedazos,
cuando unos ojazos me miran de más.

Mi barrio y mi gente, escuchan mi credo,
que a los barquinazos aprendí a cantar.
Como un canto arisco, donde el sol que muerdo
calienta mis labios para protestar.

Letra: Héctor Negro

Música: Arturo Penón

viernes, 7 de marzo de 2008

GORRIÓN DEL MUNDO

Dos textos de mi anteúltimo libro "Gorrión del mundo. Cantos, versos y poemas", Marcelo Héctor Oliveri Editor, año 2005.

SER GORRIÓN
(Canción)
(Recitado)
Si pudiera ser pájaro.
Si alguien me ofreciera esa pirueta un día...
Quisiera que me dejen
elegir ser el pájaro
que más se pareció a las cosas mías...

(Canto)
Ni ruiseñor, ni cóndor, ni zorzal.
Yo tengo mi paisaje y mi canción.
Ni colibrí, ni albatros...Nada más...
Nada más que gorrión.

Ser un gorrión linyera de ciudad.
Con toda la insinuante pretensión
de atravesar la brisa en libertad,
solamente gorrión.

Guardaría en mi sueño
el bastón de Chaplín.
Y en un muro sin dueño
me echaría a dormir.

Volaría la suerte
de estar vivo y de ser.
Y ser libre y quererte.
Por gorriona y mujer.

Vencería a la muerte.
Por gorrión, por creer.
Volvería por verte,
si me toca volver.

Para ser, solamente,
un gorrión, otra vez.

(Música de Claudio López)



GORRIÓN CON BOLSILLOS
(Tango)


I
Gorriones de raído pantalón,
gastado como el sol de esa niñez.
Sin alas, desde el alba, en borbotón.
Con huellas de distancias en los pies.

Me muestran estampitas o turrón.
Me ofrecen aspirinas y yo sé
que acaso ha de pagarles mi canción,
las cosas que dudando no compré.
II
Inocencia golpeada
para sobrevivir.
¡Qué rabona tan larga!
Sin leer ni escribir.

¡Qué gorrión con bolsillos,
que no pudo jugar!
Sin rey mago y sin nido.
Con destino de andar.

¡Qué gorrión con bolsillos!
Tras las migas y el pan.
Tras la luz y el abrigo,
esa infancia se va...

I Bis
Yo sé que en cada viaje, en cada tren,
recorre los pasillos el pregón
que trepa desde el puerto de un andén,
pegando sus saltitos de gorrión.

Me ofrecen historietas de color
y fábulas que nunca pueden ser.
Relámpagos de gestos sin rubor.
Pecados que no llegan a entender.

(Música de Carmen Guzmán)

miércoles, 5 de marzo de 2008

A OSVALDO AVENA

Maestro de la viola prodigiosa

curtida en la milonga payadora.

Guitarra donde vuelven afanosas,

tus manos, que en sus cuerdas se demoran.

 

Palermo fue tu orígen, la partida

hacia los rumbos donde te largaste.

Seis cuerdas custodiaron la guarida

del hueco musical que alucinaste.

 

Soltando tu ritual pajarería:

milongas, tangos nuevos y esa plena

jugada y remozada melodía,

 

volcaste tu temblor y tu alegría

eterna de crear, mi viejo Avena.

Lo tuyo es otra forma de poesía.

 

                           Héctor Negro

martes, 4 de marzo de 2008

CANCIÓN A NERUDA

A PABLO NERUDA

       (Tango)

            I

Estás en los hondos y claros poemas de amor,

residente en la tierra.

Con ansias de hondero entusiasta volcás tu fervor,

en la luz que se aferra.

 

El alma profunda de Chile irredento,

recorre tu voz.

Y todo se torna poesía en tu acento,

tan cerca del hombre y de Dios.

            II

Pasaron las uvas y el viento

entre tus temblores

y la mordedura de un viejo dolor.

Las fiebres de España manchada de sangre,

banderas caídas y flores,

sobre tantos pechos abiertos al sol.

 

Y fuiste el Pablo de todos,

el Pablo gigante que el fuego encendió.

Con un vendaval de poesía cargado de vida

que al hombre llegó.

             I Bis

Estás en la sabia memoria que no te olvidó,

con tus odas sembradas.

Volvés con los vientos marinos cargados de adiós,

de esperanza templada.

 

El alma de América toda, poetas,

Vallejos, Tuñón...,

saludan tu paso, tu canto y tus ecos,

que se alzan, que vuelven, que son...

 

 

                           

                              

                   Versos:Héctor Negro (10/2006)

                         Música:Osvaldo Requena

BOHEMIA NOCTURNA Y BARES PORTEÑOS

De pie: un trabajador del local, el cuentista Ignacio Xurxo y Humberto Constantini, cantando. Sentado: Héctor Negro. Estas y otras fotos y documentos los van a poder encontrar en el libro "La verdad sobre el Pan Duro. Grupo de Poesía (1955-1964)

UN POEMA-CANCIÓN MUY QUERIDO

        LEVANTATE Y CANTA

 

                       (Canción)

 

Si algún golpe de suerte, a contrapelo,

a contrasol, a contraluz, a contravida,

te torna pájaro que quiebra el vuelo

y te revuelca con el ala herida...

 

Y hay tanto viento para andar las ramas.

Tanto celeste para echarse encima.

Y pese a todo, vuelve la mañana.

Y está el amor que su milagro arrima.

 

Por qué caerse y entregar las alas.

Por qué rendirse y manotear las ruinas.

Si es el dolor, al fin, quien nos iguala.

Y la esperanza, quien nos ilumina.

 

Si hay un golpe de suerte, a contrapelo,

a contrasol, a contraluz, a contravida.

Abrí los ojos y tragate el cielo.

Sentite fuerte y empujá hacia arriba

 

          Versos de Héctor Negro

          Música de César Isella

 

Inicio de una reunión del Pan Duro en el Bar Callao 11

De derecha a izquierda: Rita (entonces esposa de Silvain); Julio César Silvain; Héctor Negro; Juan Hierba; Guillermo Harispe y Alberto Wainer

lunes, 3 de marzo de 2008

POESÍA DE LOS ´60

Para aquellos que les interese la poesía de los ´60 y la experiencia vívida de esa generación poética, desde un punto de vista sincero y con fundamento, les recomiendo las notas que escribió otro poeta amigo, del entrañable y esencial Grupo de Poesía Barrilete, Carlos Patiño. Busquen en la sección columnistas, del sitio: http://www.elmurocultural.com

NUEVAS CANCIONES

Volver a ser

  (Milonga)

¿Qué fue de aquel?

¿Qué fue de aquel que fuiste,

dónde estará?

 

¿Quién te cortó las alas?

Ramas de luz...

¿Dónde quedó tu vuelo airoso?

 

Y tu canción,

sólo dejó su eco

que se apagó

como luciérnagas fugaces.

 

Fuiste mi voz,

cuando no tuve las palabras.

Tiempo feroz

que se llevó tu furia sana,

tu azul rebeldía

plena de vida...

Deshechas en niebla.

Cuando enterraste

las ganas de gritar y de luchar,

en un recodo gris.

 

Pero serás,

ya volverás junto a nosotros.

Yo sé que vendrás

a reencontrarte

con el que fue...

         (Coda)

Y cantaré,

por tu regreso a la aventura

de ser nada más

que un hombre entero

como el de ayer...

     Música de Carmen Guzmán

     Letra de Héctor Negro

 

 

CON ESA LUZ     

    (Milonga)

       (2005)

                I

Como olfateando la primavera,

voy  por la calle,  bebo la brisa.

Y aunque me aturdan de mil maneras,

agazapada,  va mi sonrisa.

 

Cruzan infiernos por la vereda.

Ondas de angustias que se deslizan.

Pero con fiebre de enredadera,

sube mi canto por las cornisas.

                II

Por este aroma a primavera

y la caricia del sol,

perseguiré la quimera

soñando un mundo mejor.

Que la esperanza es espera

y es repechar el dolor.

Cuando la fe es la bandera

que hace flamear el amor.

              I Bis

Como jugando mi alma entera,

vuelan mis grillos el aire impuro.

Y aunque la calle se desespera,

hago camino entre tanto apuro.

 

La selva diaria nos entrevera.

Las ilusiones se deshilachan.

Pasa la prisa con piel ligera.

Pero mi canto nunca se agacha.

             II Bis

Con esa luz que nunca afloja.

Con esa luz siempre voy.

Con el verdor de las hojas

que al árbol le dan frescor.

Cuando mi canto despoja

las sombras de lo que doy.

Cantando así, se me antoja,

que me han de oír como soy.

 

    Música de Carmen Guzmán

    Letra de Héctor Negro

 

 

domingo, 2 de marzo de 2008

MI ÚLTIMO TANGO

                      OÍME, CIUDAD MÍA

                                                             (Tango)

                                 I

Oíme, ciudad mía: habrá algún día nuevo,

con chispas de algún fuego que el tiempo encenderá.

Y acaso cerraremos las viejas cicatrices,

que arrastrarán las sombras que con ellas se irán.

 

¡Podremos, Buenos Aires! De tanto levantarnos,

sabremos las maneras de no doblarnos más.

Y un viento de muchachas cantando a contraviento,

vendrán a nuestro encuentro, sin llanto ni disfraz.

                           II

Todos nos pondremos

pétalos de nubes.

Manso el corazón, tendremos.

Y volveremos a encontrarnos

con nuevas ganas de crecer.

No, no estoy soñando, y si sueño..¿qué?

Abro mis ventanas y regresa todo el sol.

Salgo con las alas puestas, con el pecho abierto,

donde anida otra ilusión...

                          I Bis

¡Qué lúcida esperanza encierra la utopía,

de avizorar un cielo que crece más allá!

Y reencontrar la luna que bebe allí en el charco

el vino milagroso que riega nuestro afán.

 

Te estoy contando un cuento que acaso sea una historia,

que aún no ha transcurrido y sé que llegará.

¡Qué magia, Buenos Aires!, trepar por tus raíces.

Salvar para tu gente, su luz y su verdad.

 

                                                Música de Carmen Guzmán

                                                 Versos de Héctor Negro


sábado, 1 de marzo de 2008

SITIO DE UN POETA AMIGO

Blogg del poeta Roberto Díaz, compañero de tantas andanzas: visitenlo.
 

ADELANTO: INTRODUCCIÓN E INDICE DEL LIBRO "LA VERDAD SOBRE EL PAN DURO"

Introducción

            ¿Qué fue lo que a más de 40 años de su formal autodisolución, me llevó a meterme a intentar la escritura de este libro sobre el Grupo de Poesía "El Pan Duro"?

            La verdad es que fueron varias las razones que me empujaron a hacerlo, hasta que ellas mismas ejercieron tanta presión sobre mi voluntad, que se convirtieron en una necesidad. Recién al sentir esa necesidad me animé y decidí  encarar esta tarea. Que al fin de cuentas no ha dejado de ser grata y movilizadora en muchos aspectos. Pero el último y decisivo envión, debo reconocer que me lo dio mi hijo, con sus contundentes y racionales argumentos, al correr de recuerdos, anécdotas y cuestiones culturales éticas y estéticas que surgían tras la lectura y presencia de estos preciados libros que palpitan en mi biblioteca, producto de aquellas pasiones y desvelos.

            Y entre esas varias razones que me fueron empujando, debo mencionar algunas que fueron decisivas para mí, como rescatar esa etapa inolvidable como experiencia de vida, tan importante en mi formación y desarrollo como poeta. Recordar esa sensación  permanente de perseguir utopías, en la que se mezclaban la necesidad de crear y de llegar con sus frutos y resultados convertidos en poemas (y canciones) a la gente que no solía ir a su encuentro. Y la tozudez de hacer algo más que escribir, publicar y difundir poemas: tratar de cambiar el mundo, la vida; de poner nuestra mejor arma al servicio de la liberación y la igualdad de oportunidades para la especie humana.

            Esto era un envión natural en nosotros los de entonces y el motor que impulsaba nuestros sueños y afanes permanentes. Como una suerte de amor derramado y enarbolado con la salud y la pureza de quien se siente parte de una ambiciosa tarea y busca encolumnarse con quienes sienten lo mismo. Y que además pueden expresarlo y repartirlo con esa "magiafantasmaniebla" (al decir de Juan Gelman) que es la poesía.

Por otra parte, ocurrió en estos últimos años que con motivo de los Premios y reconocimientos que recibió nuestro entonces compañero y co-fundador del Grupo, Juan Gelman - en el país y en el exterior-, a través de la indagación de su trayectoria y de muchas de sus respuestas a distintos reportajes que fueron bastante difundidos, surgió el dato de su pertenencia a "El Pan Duro"como fundador e integrante del Grupo. Juancito no lo olvidó ni lo ocultó, como del mismo modo vinieron a enterarse muchos de la publicación de su primer libro, Violín y otras cuestiones como producto de un trabajo y un empeño que dio comienzo a una hermosa aventura editorial y poética, impulsada por un tenaz trabajo colectivo. La repercusión de este hecho y la de la figura poética y humana de Gelman, más ciertos avatares de su existencia azarosa en la que sufrió persecuciones, cárceles, exilios, la desaparición de su hijo y su nuera (también asesinados), y de su propia nieta a la que logró encontrar con una perseverancia admirable, trajeron como "de arrastre" aquella etapa de "El Pan Duro". Al que muchos "seudocríticos"literarios y "popes"de la cultura, cuidadosamente ningunearon, como también hicieron con la "generación de poetas de los '60". Y al mismo tiempo que volvía a aparecer "El Pan Duro", en la "selectiva" memoria de algunos, aparecieron las distorsiones, los datos erróneos, la tergiversación de su actividad y trayectoria y hasta algunos conceptos peyorativos unos, calumniosos los otros. Además de los estragos del tiempo transcurrido sobre algunas memorias (inevitables), que llevaron a veces a confusión de datos a otras personas honestas que recordaban al Grupo. Y a ciertas interpretaciones no ajustadas a la verdad histórica.

De cualquier modo se comenzó nuevamente a hablar de "El Pan Duro". Los que pretendían que fuera otro "desaparecido"de la generación de los '60"(que los tuvo y en serio), tuvieron que comenzar a admitir su existencia, por lo menos en la publicación del primer libro de Gelman, ocultando cuidadosamente otros logros.

            Al mismo tiempo, en parte por lo ya señalado y también porque las generaciones de poetas y críticos fueron pasando y hubo gente nueva que quiso indagar sin prejuicios sobre aquella época, comenzó a crecer un interés por conocer aquella experiencia por parte de estudiosos y gente joven con inquietudes y curiosidad. Y se multiplicaron las búsquedas de datos e investigaciones de quienes trataron de conocer muchas verdades entrevistando a algunos de los ex miembros del Grupo (sobrevivientes y cercanos) que lograron ubicar.

También por todo esto último y para dejar constancia de la verdad de los hechos y sus protagonistas, encaré la tarea de escribir este libro.

Partí del hecho de haber integrado el Grupo desde el principio hasta el fin, ya que fui co-fundador del mismo y permanecí en él hasta su autodisolución.

No pretendí escribir una estricta historia ya que no soy historiador. No obstante lo cual, a los fines de ser lo más exhaustivo y objetivo posible, no solo recurrí a mis "vivencias" y a mis recuerdos, sino también a una copiosa documentación que guardé celosamente desde aquellos años. Me refiero a recortes de diarios, revistas literarias, volantes, todos los libros publicados, críticas literarias, informaciones, gacetillas, etc. Y sumé a todo esto los testimonios personales de quienes fueron sus integrantes y pude localizar, entrevistar y obtener de algunos de ellos un resumen escrito de sus vivencias y contagiarlos de este fervor por rescatar aquellos desvelos.[1]

De alguna manera y aunque resulte algo pretencioso, se fue construyendo sin querer una historia a la que contribuyeron sus verdaderos protagonistas. A los que aún viven los he entrevistado a todos, con excepción de Juan Gelman que no reside en nuestro país y no pude contactar, y Juan Hierba que recorriendo buena parte del mundo parece haber recalado en las Islas Canarias, según me informaron. El caso de Juana Bignozzi fue muy especial, ya que ella había respondido en algunos medios que la consultaron las preguntas que deseaba hacerle, y por la naturaleza de sus respuestas y su particular actitud ante el Grupo desde la óptica de su "carrera literaria", quise evitar una desagradable discordancia que nos llevara a un enfrentamiento no deseado.

Debo reiterar la amplia colaboración y el indisimulado entusiasmo que encontré en todos los ex-integrantes del Grupo que entrevisté; todo lo que ellos me han aportado con documentación, recuerdos y testimonios. Así como pude comprobar que nuestras propias memorias por momentos traían recuerdos borroneados por el tiempo que obligaron a consignar testimonios que diferían en algunos aspectos, ninguno de ellos de fondo. Por eso aparecen algunos recuerdos contradictorios. A todos se nos borraron ciertos detalles, se nos confundieron otros datos(después de más de 40 años), pero también a todos se nos iluminaron hechos que habían quedado algo ensombrecidos. He recurrido a algunas anécdotas que ayudan a conocer más ciertas situaciones y experiencias enriquecedoras. He incursionado en la época que nos tocó transitar, vivir plenamente y a veces también sufrir por las mismas razones que sufrió nuestro pueblo, al que siempre tratamos de acompañar y escuchar, de quien tanto también aprendimos en nuestra cruzada de lecturas abiertas, diálogos e interrogaciones. Porque, como escribiera uno de nosotros – Alberto Wainer – en una nota sobre el Grupo publicada en 1961 y más adelante reproducida: ..."consideramos que el poeta, como creador es un hombre que marcha con la multitud, en medio de la multitud, que se nutre de ella, teniendo la obligación ineludible de devolverle, en obra de arte, la misma voz que le ha entregado el pueblo..."

            He comenzado este libro relatando la génesis y el nacimiento del Grupo, que coinciden con mis comienzos poéticos, por eso me he referido a ellos en ese capítulo.

Luego he transitado a través de las publicaciones, la vida del Grupo, poeta por poeta, siguiendo el orden de los libros que perteneciendo a la Colección El Pan Duro, llevaron el sello editorial de Manuel Gleizer y los Cuadernos de Poesía de Ediciones El Pan Duro publicados luego. Casi en todos los casos evitando caer en la crítica literaria y consignando al respecto mayoritariamente, los conceptos de sus contemporáneos. De pronto interrumpí esa cronología para referirme al lugar que tanto nos sirvió de cita y mesa de diálogos y decisiones, taller, escuela, recalada y encuentro con muchos de nuestros amigos y escritores y poetas que por allí pasaban a compartir nuestras inquietudes: Callao 11. En otro momento el lugar de encuentro y realizaciones fue Noa Noa, también rememorado. En cada caso se han transcripto fragmentos de poemas de las publicaciones del Grupo solamente y no de los que se publicaron en otros  sellos editoriales, salvo en el caso excepcional de David Álvarez Morgade, que fue un "maestro" y referente casi inédito para muchos y del cual rescatamos algunos conceptos y algún poema de precaria y casi ignota edición. También rescatamos los viajes "hacia adentro" (la recorrida por los sitios donde pudimos llegar a públicos distantes de la poesía editada), los viajes "hacia afuera"(adonde pudimos prolongar en la distancia el alcance de nuestra poesía) y otros viajes que la poesía realizó por su cuenta y proyección. Quedó también relatada la experiencia editorial y activamente poética con "La Rosa Blindada", como asimismo cuestiones que tuvieron que ver con nuestra generación poética (la de los'60). Entre ellas las relaciones con el grupo de poetas, revista y editorial "Barrilete"(tan cercano a nosotros y con propósitos similares revelados en sus permanentes lecturas de poemas y en la edición de sus difundidos "Informes poéticos"). Y las connotaciones políticas y militantes que alcanzaron a nuestra generación, que asumimos con total conciencia como Grupo y también individualmente. Por último incorporamos como Anexos algunas opiniones que recabamos a ex integrantes del Grupo, que pueden esclarecer otros aspectos y definir algunas posiciones y miradas diversas con respecto a muchos de los problemas que nos movieron a definirnos en consecuencia y a conclusiones que a otros la experiencia vivida les ha dejado como saldo.

            A todos los que deseen comprender desde sus aspectos más íntimos y conocer los entresijos de "El Pan Duro", su trayectoria y sus peripecias, está dirigido este libro. A los que fueron destinatarios permanentes de nuestra poesía (la gente común), incluyendo también a poetas, estudiosos, investigadores (que encontrarán testimonios indesmentibles), ensayistas y también a los poetas de la canción (del tango, el folklore y el rock) que con sinceridad deseen conocer esta experiencia poética con intenciones de destino popular, anticipadora de tantas tentativas luminosas que compartimos luego y seguimos avizorando desde nuestra sensibilidad despierta.

            Para seguir repitiendo siempre, como nos enseñara nuestro "maestro" Raúl González Tuñón: "La poesía es una e indivisible".

 

 

 


[1] Esos escritos fueron de dos tipos: el primero fue el pedido de una idea general de su experiencia, anécdotas y la actividad del grupo, mientras que en el segundo se les hacía tres preguntas: ¿qué significó en lo personal la experiencia de El Pan Duro? ¿qué significó El Pan Duro en el panorama poético de entonces? y ¿qué aporte o influencia del Pan Duro podría reivindicarse hoy?. Estas preguntas eran para ser respondida por quienes lo quisieran, y en ese caso para que las contestaran con entera libertad o escribieran a partir de ellas. También deseo agregar que otros documentos y fotocopias de notas y comentarios publicados durante nuestra época de actividad plena, me fueron entregados con absoluto beneplácito por los restantes miembros del Grupo.

 

 

 

índice

 

1.              Introducción

2.              Mis comienzos poéticos y el nacimiento del Grupo "El Pan Duro"

3.              "El Pan Duro", Juan Gelman y "Violín y otras cuestiones"

4.              Una nueva meta: "Bandoneón de papel", el Grupo en marcha y otras cuestiones

5.              El Pan Duro se agranda y sigue publicando nueva poesía. Julio César Silvain
6.              Primer Cuaderno de Poesía del Grupo: "Los muelles insumisos" y Rosario Mase
7.              CALLAO 11

8.              La presencia femenina en CALLAO 11: Juana Bignozzi

9.              Vientos de CALLAO 11: Luis Alberto Navalesi
10.          Otros vientos de CALLAO 11: Alberto Wainer
11.          Aires provincianos en El Pan Duro: Guillermo B. Harispe
12.          Viajes hacia adentro, hacia afuera y de los otros...
13.          "NOA NOA"
14.          El breve pero recordado paso de Atilio Jorge Castelpoggi por "El Pan Duro"
15.          Un recuerdo para David Álvarez Morgade, el poeta que nos marcó a todos
16.          "La Rosa Blindada", una muestra colectiva y algo más que un hecho editorial
17.          Otra publicación, el aporte de Roberto Díaz y "Epitafio del gris"
18.          La "década del 60", "Barrilete", nosotros, la política y otras yerbas
19.          Anexo de otros testimonios

20.          Epílogo

21.          Publicaciones del Grupo "El Pan Duro".